sábado, 29 de noviembre de 2008

Cuento Chino


Cierto hombre, que había comprado una vaca magnífica, soñó la misma noche que crecían alas sobre la espalda del animal, y que éste se marchaba volando. Considerando esto un presagio de infortunio inminente, llevó la vaca al mercado nuevamente, y la vendió con gran pérdida. Envolviendo en un paño la plata que recibió, la echó sobre su espalda, y a mitad del camino a su casa, vió a un halcón comiendo parte de una liebre. Acercándose al ave, descubrió que era bastante mansa, de manera que le ató una pata a una de las esquinas del paño en que estaba su dinero. El halcón aleteaba mucho, tratando de escapar, y tras un rato, al aflojarse momentáneamente la mano del hombre, voló con todo y el trapo y el dinero. "Fue el destino", dijo el hombre cada vez que contó la historia; ignorante de que, primero, no debe tenerse fe en los sueños; y segundo, de que la gente no debe recoger cosas que ve al lado del camino. Los cuadrúpedos generalmente no vuelan.

(Herbert Allen Giles)

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Me encanta este lugar mágico. Cuando entro parece que toda mi habitación se llena de hadas y duendecillos.

MANUEL SOSA dijo...

Hola "Dama" de nuevo por tu blog del que soy adipto. No se si encaja dentro de tu blog "la cancion de Navidad" De C.Dikens. Lo digo por lo de la Navidad

Abril dijo...

Gracias por tu visita Susana. Cuando alguien llega al blog, mis hadas y mis duendes cobran vida y crean la magia que percibes.

Gracias por hacer que estén vivos.

Un beso.

Abril dijo...

Hola Manuel.
Gracias por tu fidelidad. Cada vez que entras, una de mis hadas recibe sus alas...
Este mes empiezo a subir los cuentos propios de estas fechas. Por supuesto que Charles Dickens tiene un lugar reservado en mi blog. Si conoces alguno interesante, no dudes en enviármelo.

Un beso.