martes, 27 de abril de 2010
El Ladrón y la Luna
Un maestro de Zen vivía el tipo de vida más simple, en una pequeña choza a los pies de una montaña.
Una tarde, mientras estaba ausente, un ladrón entró furtivamente a la choza sólo para encontrar que no había nada para robar.
El maestro de Zen volvió y lo encontró. “Usted ha venido desde muy lejos a visitarme”, le dijo al merodeador, “y usted no debería volver con las manos vacías. Por favor, tome mis ropas como regalo”. El ladrón estaba desconcertado, sin embargo tomó las ropas y se dio a la fuga.
El maestro se sentó desnudo, mirando la luna. “Pobre tipo“, meditó, “desearía poder darle esta hermosa luna”.
(Cuento zen)
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1 comentario:
Espero que este tu mes, lo hayas vivido plenamente.
¡¡ojalá!! todos pensáramos como el maestro zen y sobre todo poder regalar lunas hermosas, sin tener en cuenta a quien.
Deseo para ti la mas hermosa luna, que siga iluminando tus pensamientos.
Un beso.
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